El sol es como una fuente de vida y es tan necesario como el comer. Y no solo en los meses de verano, ya que el sol es esencial incluso en invierno. El astro sol nos aporta energía aunque tenemos que tener igualmente cuidado con el, incluso en invierno.

El frío del invierno, con los vientos, las heladas y las inclemencias hacen que tengamos que tener mucho cuidado con la piel, ya que el sol, es igualmente peligroso tanto en verano como en el invierno.

Sobre todo si eres de las que los fines de semana o en tu tiempo libre te dedicas alguna actividad en la montaña o simplemente practicas deporte en la nieve como el esquí, tienes que saber que las radiaciones solares a más altura más peligrosas son. En concreto la nieve refleja un 85% de radiación solar, mucho más elevada que un día en la playa.

Todo ello si no te proteges a parte de sufrir quemaduras solares, tu piel pierde juventud ya que disminuyen las defensas inmunitarias y puede incluso hacer aparición el herpes y lo que es más grave aún, puede provocar la aparición de un cáncer de piel. Con lo cual son los mismos inconvenientes que el sol del verano.

Para ello igualmente hay que proteger la piel dependiendo el tipo de piel tengas.  Productos para nutrirla e hidratarla para que esté protegida de las inclemencias del tiempo, bien sea frio, sol o aire. Importante poner atención igualmente en las manos y los labios ya que son los más expuestos al clima.

En invierno hay que cuidar igualmente la piel, mimarla a diario tanto o más que en el verano.

Imagen |  batega