Título: Secuestrados
Director: Miguel Ángel Vivas
Duración: 85 minutos
Género: terror
Fecha de estreno en España: 25 de febrero
Intérpretes: Fernando Cayo, Manuela Vellés, Ana Wagener
Secuestrados, trailer de la nueva película de Miguel Ángel Vivas
¿Debo ir a verla? Casi de la nada ha surgido una nueva concepción del terror.
La segunda película de Miguel Ángel Vivas demuestra que hay toda una generación de cineastas españoles esperando a tomar el relevo. Con unos medios de producción ajustados y unos parámetros expresivos perfectamente delimitados por el propio cineasta, Vivas entrega una brutal y honesta cinta de terror que desafía al espectador con hora y media de suspense como no habíamos visto en mucho tiempo.
Y lo hace de forma vibrante y, además, técnicamente insuperable. Vivas pronto consigue que la cabriola sobre la que se sustenta la apuesta, es decir, ese aparente ‘más dificil todavía’ que son los doce planos secuencia en los que se divide el filme, acaben siendo casi la única forma de contar la historia. El dinamismo visual que otorgan; la concepción del espacio que imponen; el abanico de posibilidades narrativas que abren, dan a la película aires nuevos pese a lo sobado de la historia, que por cierto, nunca deriva en discurso sociológico alguno. Pero a pesar de esto, Vivas pone en primer término en todo momento la verosimilitud, la insoportable violencia física y el ambiente malsano y agobiante de la experiencia -pese a algún episodio más irregular-, hasta tal punto que pronto nos olvidamos de dicho recurso. El mayor halago a Secuestrados es que la forma no está al servicio de la nada, sino que ésta y el fondo se presentan como una sola cosa. En cuanto a su comentado uso de la violencia, la película se revela realmente como extremedamente elegante y sobria, ya que siempre vemos mucho menos de lo que parece… otra cosa es que no nos haga falta ver más.
Tan impactante es el clima logrado por Vivas que el filme, en su aparente simplicidad, pide tiempo para ser valorado y deglutido correctamente. No se trata de un consumible horror de multisalas. Pese a su cabriola formal, en Secuestrados apenas existe la estilización, la ironía o el sentido del humor subterráneo que anula los efectos de la violencia en muchos títulos de terror. A ello contribuye la ambigüedad en los personajes. Vivas no nos pide inmediatamente que nos identifiquemos con las tres víctimas -maravillosamente interpretadas, por cierto-, y de hecho éstas resultan un tanto desagradables al comienzo. Lo que sucede después lo cambia todo y forma parte, en definitiva, del agrio atractivo de esta desagradable, fenomenal y honestísima propuesta repleta de gran cine.
Iñigo de Montoya
Sr.Gonzalez,¿el relevo de que?…¿de lo absurdo? vaya peliculita.Sospecho cada dia mas que aqui se cobra por bajines para hacer este tipo de criticas que ya bienen incluidas en la subvencion…guion absurdo,situaciones absurdas y…bueno no sigo.Si salvo algo es la preparacion para rodarla en pocos planos secuencias pero…¿quien me asegura que aqui tampoco hay truco?.
Juanma González
Me ha pillado usted. A veces me siento mal, de todo lo que cobro en subvenciones. De todas formas, su comentario merece también una subvención. Por cierto, que el argumento de lapelícula da para poco unguento público, no es muy del perfil que se busca en esos casos, según tengo entendido.
Iñigo de Montoya
Sr.Gonzalez,no soy critico especializado pero tantos años viendo cine…ya no me la dan.Por favor revise la peli de nuevo y digame que no esta llena de situaciones absurdas.Atentos a la escena del cajero de madrugada y el atracador observandolo todo…¿de quien fue esta idea?…en el cine se escucharon risas (por cierto no habiamos mas de cinco)y como esta muchas otras.Un consejo Sr.Gonzalez desde mi experiencia viendo cine desde niño (y ya no soy tan joven)…¡No es lo que te cuentan,sino como te lo cuentan!ahi esta la clave de todo….por cierto has visto «13 Tzameti» o «En la habitacion» o una española del 57 y de la que nadie tiene ni puta idea «Las manos sucias»…pues aqui se resume el consejillo que le doy…saludos hombre y no se enfade.
Juanma González
No, no me malinterprete…no era enfado, era ironía. Creo honestamente que el gran mérito de Secuestrados es, precisamente, el cómo te lo cuenta, y eso es lo que pongo en la crítica. Y por la tensión con la que viví la película se merece mis cuatro estrellas. No he visto las que me señala y no entraré ahí, estoy seguro de uqe estarán bien… pero una cosa no excluye la otra.
Iñigo de Montoya
Le respeto Sr.Gonzalez,es usted el unico critico que contesta mis mensajes…eso ya me dice mucho…odio el silencio por respuesta.¿De verdad no ha visto «13 Tzameti» (Gela Babluani-2006),pero si es lo mejor de los ultimos años junto con «Un Profeta».A mi cuando me hablan bien de una pelicula (me da igual de quien venga la informacion,a veces suena la flauta),suelo ir corriendo a verla,o a buscarla si ya tiene unos añitos,eso es por que me fascina el cine y encontrar una joya es casi imposible.PD:Si algun dia encuentra «Las manos sucias» de Jose Antonio de la Loma (1957) por favor hagamelo saber pues llevo mas de 20 años tras ella y nada de nada…tu veras que al final vamos a ser amigos y todo…saludos.
Sergio
Totalmente de acuerdo con la crìtica, acà lo rescatable no es la historia archivista, si no la forma en que se narra, eso es lo que me ha echo pasar uno de los momentos màs desagradables/agradables que he visto en el cine. Cito una pelìcula que muchos han alabado: El dìa de las madres, con Rebecca de Mornay… argumento similar, pero que no tiene esa maestrìa a la hora de contar la historia y que a mì me ha dejado bastante decepcionado. Secuestrados es un interesantìsimo ejercicio de nuevo cine, càmara en mano sin càmara en mano, brutalidad sin mostrar tanto, y una situaciòn tan real que realmente aterra.
A mi me pareciò casi perfecta, esa casi ausencia de banda sonora angustia aùn màs, las actuaciones realmente angustiantes, lo que me hizo casi aplaudir en el momento cùlmine de la pelìcula (el que protagoniza la hija del matrimonio) si algo que sea capaz de provocar eso no es buen cine, ojala entonces se sigan haciendo pelìculas tan malas y absurdas como èsta ¿?