Título: Transformers. El lado oscuro de la luna
Título original: Transformers. Dark of the Moon
Director: Michael Bay
Duración: 150 minutos
Fecha de estreno: 29 de junio
Intérpretes: Shia LaBeouf, Rosie Huntington-Whiteley, Josh Duhamel
¿Debo ir a verla? Extenuante, absurda, imposible… el disparate definitivo de Michael Bay.
No sé si Michael Bay hace películas para el público o para enojar a la crítica. Son dos cosas muy distintas. Todos sabemos que los tiempos de superproducciones históricas como Lawrence de Arabia han acabado. El cine espectáculo, entendido como acontecimiento, se desliza por una senda sinuosa, y existe un constante sentimiento de pérdida sobre las constantes narrativas de lo que una vez fue y ya no es. Michael Bay ha puesto rostro a ese sentimiento en la psique colectiva de cinéfilos de todo pelaje, y está muy satisfecho de encarnar esa paranoia. Enfatiza en cada película todo aquello que se le critica. Y aquí acaba la filosofía, y vamos al grano: Transformers 3 tiene la hora y cuarto final más absolutamente brutal que jamás se ha visto en una sala de cine.
Todos los responsables del invento se han dedicado desde hace meses a afirmar tajantemente que esta Transformers: el lado oscuro de la luna, solucionaría los errores de la segunda entrega, perdida en un mar de confusión argumental y visual. Nada de eso: la cinta comienza con tres cuartos de hora de narración absolutamente inoperante, en la que Bay demuestra que ha oído campanas pero no sabe dónde, o en todo caso, muestra el más absoluto desinterés por desarrollar algo de forma más o menos progresiva o uniforme: Sam Witwiky sale de la universidad sin trabajo, ha cambiado de novia, y los Transformers están incorporados al sistema de defensa norteamericano. Se suceden vagas referencias a la realidad que Bay procesa a su manera, como si la cinta fuera un anuncio de Victoria Secret (impagable la presentación de Rosie Huntington Whiteley, en bragas y abrazando un conejito de peluche) o un anuncio publicitario de instituciones norteamericanas (como el ejército y, esta vez, la NASA, como en Armageddon). Escenas humorísticas y un sucinto embrollo sentimental en las que un personaje habla de una cosa y su interlocutor le contesta otra distinta. Bay se limita a usar los diálogos como un mal necesario, un mero acompañamiento para las imágenes, que es lo que verdaderamente le importa.
Porque la primera hora de cinta es un mero preliminar, en el que Bay que se dedica a disponer las piezas del juego como mejor le parece para orquestar hora y cuarto de batalla estelar dirigida con una apabullante capacidad visual. Una vez que el personaje de Sentinel Prime (Leonard Nimoy en v.o.) da a la cinta el giro definitivo, ésta se convierte en el filme de guerra más rabiosamente atroz, absorbente, extenuante y excesivo que pudiera imaginarse. Un ‘Black Hawk Derribado’ que no necesita más excusas para sostenerse que la increíble habilidad visual de Bay, capaz de gestionar escenas de acción con multitud de elementos en cada plano, sin que le tiemble el pulso lo más mínimo.
El cúmulo de escenas memorables que se suceden entonces desafía todo pronóstico, y Bay demuestra que hay un director en él que, simplemente, se resiste a hacer las cosas de otra manera que no sea la suya. La llegada por aire de los hombres de Lennox (Josh Duhamel) y Sam en los alrededores de cierto rascacielos, y las consecuencias de todo ello, están entre lo más espectacular del año. El 3D brilla como nunca desde Avatar, e incluso a los más desinteresados en el formato –entre los que me cuento-, les provocará verdadero vértigo en más de una ocasión precisamente por el excelente diseño de las escenas de acción. Bay da la razón a todos sus detractores pero demuestra que a la hora de orquestar un espectáculo nunca visto en pantalla, coqueteando con el atrevimiento de un (no tan) ingnorante con el absurdo y el caos, sencillamente no tiene ningún rival. Le pese a quien le pese.
JuanJo
Entonces… ¿Vamos o no vamos? XD. Es que lo de la primera hora, me tira para atrás, pero lo de la segunda hora y cuarto, me tira hacia delante ¿que hago?
Teniendo en cuenta eso si, que la primera me gusta y la segunda he intentado verla un par de veces y he conseguido terminarla…
Lo dicho ¿que hago Dios mioo?
maribel
JuanJo,debes ir aunque sea por ver la segunda mitad merece la pena y desde luego en 3D.un saludo
Daniel Suarez
puedes hacer todo lo bonito que quieras bay… pero si no me haces sentir nada…me recuerda cuando eras chico y jugabas con figuras de accion, asi es ver Bay solo que con millones de por medio. No quiero tus hamburguesas… comida chatarra.
Juanma González
Hola JuanJo… yo iría, solo por el espectáculo merece la pena pagar el dinero. Que te guste o no la película ya es otro tema
Anderson
vi la pelicula anoche en 3D, el argumento un fiasco y absurdo total… los efectos muy excesivos, solo pasar el rato.
Santi
Yo la he visto ayer yos digo una cosa, ES ACOJONANTE.
Claro que el guión no es la leche, pero que esperáis? Por favor no dejéis de verla en 3D, para mi mejor incluso que Avatar. Cine de palomitas y un divertimento asegurado.
FosfoMan
Ey, cómo que qué esperabas? Parece que hoy en día hay carta blanca para asumir que al espectador al que le gustan las pelis de robots gigantes automáticamente hay que apagarle el cerebro para ver la película. Una cosa es que el guión sea simplón y todo lo predecible que quieras (como en Avatar) y otra que sea una confusión de incoherencias, chistes de pedos y personajes irritantes (como Transformers 2).
Supongo que esa mentalidad de «es cine de palomitas» es la que hace que cada vez las películas de acción sean más bodrios y encarguen los guiones al sobrinito pequeño de alguno que pasaba por ahí.
FosfoMan
Después de haberla visto a pesar de estar convencido de que iba a ser una película horrenda (qué se le va a hacer, me gustan los robots gigantes) ya puedo opinar un poco mejor.
La película no tiene pies ni cabeza. Michael Bay ha desterrado la palabra coherencia de su diccionario junto con algunas otras en la misma línea.
Curiosamente, lo más realista me pareció la relación entre Sam y su chica. Direis que dónde está el realismo habiendo robots alienígenas gigantes, pero asumiendo ese detalle, cualquier tipo de lógica en el desarrollo es pura coincidencia.
Por algún motivo, ahora los robots babean. Sólo los decepticons, claro, para que se note lo malvados que son. Puedo aceptar escapes de fluidos cuando reciben tortazos, pero por qué escupe Starscream al hablar? Que sí, que ya sabemos que es malvado, no hace falta remarcarlo de esa forma.
La batalla final (bueno, ocupa media película) es definitivamente tan espectacular como carente de sentido. Soldados que aparecen de la nada, planes de batalla sin sentido y comportamientos absurdos. El malvado plan del malvado tipo cada vez que lo pienso tiene menos sentido. ¿Restaurar algo estrellándolo contra otro algo?
En fin, que la película es horrible. Si eres de los que se cabrean con argumentos estúpidos, no la veas. Si eres capaz de desactivar esa parte del cerebro y ver la película como una sucesión de situaciones estúpidas como si fuera una comedia, es probable que resulte entretenida.
Julio Soto
Un bodrio acojonante.
La historia es un follón de narices en donde me perdí al cabo de un rato. Intentaba conectar lo que aquí se contaba con las otras peliculas y terminé liándome con tanto salto en la narración y tanta traición.
Tras quedar hecho un embrollo, llegó la batalla final (joder, media película que es la batalla de marras) y ahí el cerebro se me hizo papilla. Porque visualmente y adrenalínicamente (peazo adverbio acaba colar) la película es pluscuamperfecta, superlativa, una orgía de destrucción donde nada, absoluamente nada, tiene la más mínima coherencia ni verosimilitud. Tan solo es una sucesión brutal de explosiones, saltos, golpes y peleas que dejan a las anteriores a la altura de meros experimentos preparatorios, tal es su descomunal escala.
Es, por tanto, un trabajo hecho para generar adrenalina a lo bestia mientras se te derreten las retinas. Lo mismo vas a la consulta de un médico y logra lo mismo con una jeringuilla y un hierro candente cerca de la pupila.
Los responsables de la infografía debieron hacerse violentísimas pajas a dos manos sobre los ordenadores hasta sangrar.
Como película es una descomunal basura. Como entretenimiento, un buen sustituto de una sobredosis de cocaína. El cine parece que ha degenerado en un absurdo, porque esto debería proyectarse en parques temáticos.
Yo con estas cosas no puedo.
Max
Yo nada mas no puedo parar de ver como se sumergen en ridiculez todo aquel que se hace llamar «critico». Es como tratar de buscar algo de poesia en un comic de un diario.
Que esperaban? Piscas de romance con un drama y un dialogo bien elaborado y una fusion perfecta entre estos dos generos mas la accion y la adrenalina? esperaban que optimus diga algo como «ser o no ser»?
Por dios, deberian ahorrarse el tiempo que gastan criticando lo incriticable, porque todos saben bien que estas clases de pelicula van dirigidas al publico, al entretenimiento, al provocar un gran asombro en el espectador y hacerlo decir «wow!», nadie va esperando una buena historia que conmueva al publico al punto de robarles una lagrima, nadie va esperando una enseñanza de una gran pelicula.
Es una maldita pelicula de robots gigantes! la gente va a verla esperando ver eso, mucha accion, batallas increibles con efectos increibles y van a asombrarse de estos, van esperando ver grandes peleas de vs. entre personajes que todos conocieron en su infancia viendo en dibujos animados pero ahora con una imagen cruda y definida y unas escenas exageradamente logradas, eso espera la gente.
No puedes intentar ver con un ojo critico a esto, no puedes intentar estar saludable si sabes que comiendo comida chatarra no lo lograras, no puedes esperar encontrar una gran poesia o novela dentro de un diario publico, no puedes esperar ver arte en un producto dirigido al entretenimiento, es tan claro como el mismisimo agua.