La gala de los Globos de Oro 2012 celebrada anoche en el hotel Beverly Hills, y que fue presentada por tercera vez consecutiva por Ricky Gervais, decepcionó un poco a los espectadores en busca de emociones fuertes. El cómico británico, que el año pasado generó una enorme controversia debido a la agresividad de sus bromas contra los famosos de Hollywood, esta vez estuvo algo más contenido. Pero eso no significa que su labor fuera neutral ni que su discurso inicial estuviera repleto de grandes frases.

Gervais empezó fuerte, explotando el temor de la platea de famosos a ser la nueva víctima de sus chistes. “¿Nerviosos?” -comenzó- “aquí tenéis al cómico británico número uno del mundo presentando la segunda ceremonia de premios americana más importante, en la tercera emisora más importante. Perdón, la cuarta”.

Algunos se lo tomaron con humor, como Jodie Foster y las bromas a costa de su castor (“no he visto ni el suyo ni la película”), pero también abundaban las caras de póker e incluso un disimulado rechazo al británico.

Kim Kardashian no debía estar presente en los Globos de Oro 2012, ya que probablemente habría salido a arañar a Gervais en la cara. Las referencias a la explosiva famosa de los reality show norteamericanos sirvió de pie para un buen puñado de chistes. Gervais llegó a decir que comparar los propios Globos de Oro con los Oscar “es como comparar a Kim Kardashian con Kate Middleton: un poco más escandalosa, sucia, alcoholica y fácil de comprar». Gervaís ponía asíen duda la honorabilidad de la Asociación de la Prensa Extranjera que concede los premios, que ha estado en la picota en numerosas ocasiones por soborno. Luego seguiría atizandola: “He visto discursos de aceptación de James Cameron más largos que sus matrimonios”.

Tampoco se libró Eddie Murphy en los Globos de Oro 2012. Según Gervais, éste rechazó presentar la gala igual que hizo con los Oscar. “Cuando dijo sí a Norbit y te dice no a tí, sabes que estás en problemas”. No obstante -dijo- “es muy versátil. Eddie Murphy y Adam Sandler hicieron todos los papeles de ‘Criadas y señoras’”.

Y no dudó en reírse de la controversia del año pasado. La AFP -dijo- me ha dicho que “si os ofendía a alguno de vosotros o causaba alguna controversia, definitivamente me invitarían también el año próximo”. Tras hablar de su pequeño pene, que no obstante “funciona, esta bien”, y alabar comedias como ‘La boda de mi mejor amiga’ y series como ‘Homeland’ -que resultó ganadora- y ‘Boardwalk Empire’ -«una serie sobre inmigrantes, como la AFP”-, Gervais dio paso a Johnny Depp, que como él mismo recordó, fue una de sus principales “víctimas” el año pasado, a costa de ‘The Tourist’.

Una de las principales polémicas, en lo que a nosotros respecta, es la que hizo a costa de Antonio Banderas y Salma Hayek. «Estoy impaciente por presentar a nuestros siguientes invitados. Y voy a explicar por qué estoy emocionado. Admiro su trabajo desde hace muchos años y acabo de hablar con ellos por primera vez. Estoy encantado. Son sensacionales y tienen un talento extraordinario. Y probablemente son muy interesantes. El problema es que no les entiendo «.

Banderas salió al escenario un instante después. “Dejadme contestar a Ricky», dijo, antes de ponerse a recitar a Calderón en castellano y a toda velocidad: «En esta apacible quinta, adonde el mayo gentil los países que el abril dejó bosquejados, pinta, aunque es esfera sucinta para el sol de tu hermosura…». Hayek le cortó: «yo tampoco te entiendo» y ambos se ganaron los aplausos de los allí presentes. A mi la broma todavía me huele a (algo) preparada.

Otros como Madonna tampoco se cortaron demasiado en contestar a Gervais, que arremetió contra la reina del Pop («no, no hablo de Elton John») y su presunta virginidad. «Si todavía soy virgen, Ricky, ven y haz algo para solucionarlo, hace mucho que no beso a una chica… en la televisión». Madonna se refería a su famoso beso con Britney Spears en unos premios MTV.

No obstante, el que se llevó la palma fue George Clooney, que al ganar el premio al mejor actor por la maravillosa Los descendientes no se cortó un pelo a la hora de hablar del tamaño de los genitales de Michael Fassbender. “Michael, honestamente… ¡podrías jugar al golf con las manos a la espalda!». Y todo ello acompañado de un bastón, a modo de broma a su buen amigo Brad Pitt, que llamó la atención de todos portando uno debido a un leve accidente de esquí.

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