En 1999, ‘Oriente es Oriente’, una pequeña película sobre una familia formada por un pakistaní , una británica y sus hijos, se convertía en una de las grandes sorpresas del cine europeo de aquel año. El filme nos mostraba las contradicciones entre la cultura del cabeza de familia y su progenie, criada en la turbulenta Inglaterra de los setenta. El largometraje de Daniel O’Donnell logró en su momento el BAFTA al mejor filme británico y triunfó en el Festival de Valladolid, donde logró la Espiga de Oro a la Mejor Película y el premio a la Mejor Actriz para Linda Bassett.
En ‘Oriente es Oriente’ nos volvemos a reencontrar con la familia de la primera parte unos años después. Sayid, el hijo pequeño que se escondía tras una parka , es ahora un adolescente que sufre el acoso escolar y tiene que aguantar a un padre que quiere que asuma las tradiciones de su país Para encarrilarle, su progenitor le envía a vivir con su primera esposa y las hijas que abandonó a Pakistán. Allí, la cultura eminentemente británica del chico chocará con las costumbres locales.
Gran parte del equipo de la película original repite en esta tardía secuela y el tono parece el mismo que en su precedente, aunque el director sea distinto. O’Donnell deja su puesto a Andy De Emmony, un realizador formado en la televisión británica.
‘Oriente es Oriente ‘ también el primer largometraje que distribuye en España Kiss Comunicación. En próximas fechas, la empresa se encargará de hacer llegar a nuestro país filmes como la cinta de animación ‘Khumba’, de Anthony Silverston; la serbia ‘La Parada’ (The Parade)de Srdjan Drajojevic; la croata ‘Los Niños del Cura’ (Svecenikova Djeca), de Vinko Bresson, o la brasileña ‘Do Começo Ao Fin’, dirigida por Alvizio Abranches.