Definición y algunas consideraciones

Se llama coito anal al acto de introducir el pene en la vía anal y se da tanto en relaciones heterosexuales como en homosexuales. Antes se le solía decir «sodomía» haciendo referencia a Sodoma, ciudad que aparece en la Biblia. Con el tiempo también fue llamado sexo “contra natura” debido a que según la tradición religiosa, solo era natural aquel sexo que se practicaba teniendo fines reproductivos, por tanto, todo lo que no encajaba en aquel rubro era considerado pecaminoso. Si embargo, hoy en día no se acepta este término sino que son variantes de los juegos o prácticas sexuales.

El ano de igual manera que la vagina, tiene terminaciones de nervios que son sensibles y esto se da en los hombres como las mujeres heterosexuales, y aunque a veces se piensa que estas terminaciones quieren decir una tendencia homosexual, muy a menudo un hombre heterosexual disfruta con algún tipo de masaje en el ano.

Hoy en día, se sabe que un 40% de las parejas heterosexuales lo han practicado al menos una vez. Así, algunas personas consideran que practicar sexo anal es algo divertido, mientras que otras lo ven como algo dolorosísimo, sucio y pecaminoso y lo cierto que practicarlo requiere de una gran dosis de confianza mutua, además de una buena lubricación, capacidad de comunicación y sobre todo mucha paciencia por parte del hombre.

Este no se podrá mover de manera enérgica como sí lo podría hacer durante una penetración vaginal porque su pareja podría tener grandes consecuencias, al dañar los tejidos anales que son muy delicados y es que el sexo anal es una actividad de alto riesgo debido a que se es más propenso a infectarse de VIH.

De otro lado, hay que resaltar que su práctica tiene que ver con la sumisión física y también psicológica por lo que para muchas personas aparece como un gran atractivo y alternativa al sexo vaginal. Así, es la mujer quien debe controlar el ritmo y la profundidad de la penetración y como en cualquier práctica sexual, ninguna de las dos partes debe sentirse obligada a practicar este tipo de sexo ya que debe ser algo placentero y además, hay que tener claro que el recto no está diseñado para la práctica del sexo y no puede soportar un repentino encuentro sexual sin sufrir daños.

Algunos consejos para los que recién se inician

Cuando se desee realizar esta práctica hay que tener en cuenta diferentes recomendaciones:

1. Ya que se trata de un esfínter muscular este tiende a darle un poco de resistencia, por lo que la mujer debe de relajarse lo máximo posible evitando pensamientos que puedan llevar a contraer estos músculos.
2. Debido a que este no se autolubrica se debe usar cremas o gel lubricante que no irrite, tanto en el pene como en el ano (con la practica esto puede eliminarse, ya que pueden usarse los mismos fluidos vaginales)
3. Al realizar la penetración debe hacer de manera cuidadosa, con suavidad y también paulatinamente, en este caso es mejor que se dilate primero esta zona con un dedo antes de la introducción del falo.
4. Usar preservativos es muy importante debido a que la mucosa del recto también permite la entrada de virus y bacterias. En este rubro cabe resaltar que nunca se debe realizar una penetración vaginal luego de una anal, porque hay un alto riesgo de que la vagina se contamine con lo que proviene del recto y que también el pene tendría que llevar consigo en caso de no efectuar una higiene adecuada.
5. No debes penetrar a tu pareja si esta piensa que está yendo en contra de sus preceptos morales o religiosos, o porque simplemente cree q no es algo placentero.
6. Hay que tener en cuenta que una de las principales causas de disgusto, en ambas partes, puede ser que aparezca material fecal cuando se retira el pene del recto, por tanto, algunas personas prefieren usar enemas antes de tener este tipo de sexo, para que la zona quede libre sin embargo, es un método de uso muy poco frecuente

Así, para muchas personas heterosexuales el sexo anal puede ser una forma de obtener placer en grandes cantidades, es decir de manera erótica y también sexual, sin embargo, debido a que se le ve socialmente como un tabú, genera muchas preguntas y por tanto, también requiere de muchas precauciones. Saber de estas, nunca será en vano.

Por tanto, se debe tener claro que las personas tienen muchas opiniones acerca del coito e inclusive algunas son claramente contradictorias. De un lado, no todos aceptan que este tipo de práctica sexual sea normal en una pareja que es heterosexual, sin embargo para otras, esta práctica es tan normal como otras que le proporcionan placer a ambas partes, es decir tan equivalente al sexo oral o al sexo vaginal.

Sin embargo, se debe tener en claro que ya que se ha manejado durante mucho tiempo bajo un clima de ocultación, debido a una constante presión de los prejuicios y el hecho de que la religión cristiana lo haya considerado como una aberración, muchas dudas o preguntas no han sido solucionadas y más se ha caído en el silencio y la ignorancia. Preguntar, buscar información, encontrar respuestas y sentirse libre de encontrar soluciones es la mejor manera de acabar con los riesgos que puede conllevar esta práctica y que realmente son innecesarios. En líneas generales, se debe tener en cuenta que el sexo oral exige sus propias precauciones.