El buen tiempo se acerca, las faldas se acortan, los pantalones también, llevamos mucha menos ropa encima y con el cambio de estación empezamos a lucir nuestra figura. Lo preferible es preparar nuestro cuerpo poco a poco para poder lucir una buena figura, sin embargo, muchas personas optan por la dietas milagro de moda sin conocer las consecuencias negativas que puede tener para su cuerpo. Aprende a diferenciar entre las auténticas dietas para adelgazar rapido y aquellas que solo perjudicarán tu salud.
La pérdida de peso para lucir un buen tipo en verano puede ser una maratón, donde cuidamos constantemente nuestra alimentación y llevamos una vida activa, pero normalmente terminamos planteárnosla como una carrera de velocidad. Y para ello recurrimos a dietas que nos prometen conseguir la figura que deseamos en muy poco tiempo, son las denominadas dietas milagro. Pero ¿por qué no confiar en dietas milagro?
No responden a ningún fundamento nutricional o científico: No hay el trabajo de un equipo de nutricionistas o científicos detrás de las milagrosas recetas de este tipo de dietas para adelgazar rápido; se fundamentan básicamente en las creencias populares. Las dietas milagro pueden acarrear una deficiencia de vitaminas y minerales debido a la alimentación desequilibrada que suelen proponer.
El efecto yo-yo: según la AEDN (Asociación Española de Dietistas Nutricionistas), el 95% de las personas que pierden peso con una dieta milagro vuelve a recuperarlo una vez dejan el régimen. Al terminar el período de poca ingesta de alimentos, nuestro cuerpo tiende a ingerir más de lo que necesita, lo que provoca una mayor recuperación del peso que se ha perdido.
Cambios en el metabolismo:Este tipo de dietas aconsejan la ingesta de alimentos con un escaso aporte de energía, lo que puede producir alteraciones en el metabolismo. Al ingerir una cantidad de energía inferior a la que necesitamos, el metabolismo se ralentiza para gastar menos y crea reservas. Al abandonar la dieta milagro, el metabolismo sigue gastando menos porque está habituado a las comidas poco energéticas y almacenando la que le llega, por ello ecuperamos el peso original en forma de grasa corporal.
Pérdida de masa muscular: al tratarse de dietas desequilibradas, el cuerpo recurre a las reservas de emergencia almacenadas en los músculos. Perdemos peso sin esfuerzos físicos, pero la verdad es que se reduce masa muscular (tejido muy rico en agua) y no grasa almacenad en nuestro cuerpo. Por ello, debemos desconfiar de las dietas de rápido adelgazamiento que nos prometen perder más de 0,5kg. / 1kg. a la semana.
Foto: freakapotimus en Flickr.